RINOPLASTIA ULTRASÓNICA

Redefiniendo la estética nasal con tecnología avanzada.

Doctora Brasó

La rinoplastia ultrasónica ha supuesto un avance revolucionario en la cirugía estética nasal que combina precisión y suavidad para lograr resultados estéticos excepcionales.

Este innovador procedimiento que practicamos en la Clínica Dra Brasó, emplea tecnología ultrasónica para esculpir la nariz con mayor precisión y menos traumatismo, ofreciendo una transformación facial armoniosa y segura.

En nuestra clínica, combinamos la experiencia de cirujanos especializados con la tecnología de vanguardia para brindar a nuestros pacientes resultados excepcionales. La Rinoplastia Ultrasónica no solo perfecciona el perfil nasal, sino que lo hace con mínima invasión y una recuperación más rápida.

Tipo de intervención

La rinoplastia ultrasónica se basa en la tecnología piezoeléctrica, a diferencia de las técnicas convencionales que emplean sierras, escoplos o fresas. Esto nos permite realizar cortes precisos en el tejido óseo (osteotomías) preservando los tejidos circundantes.

Se realiza bajo anestesia general y, por lo general, implica una estadía corta en el hospital para garantizar una recuperación óptima antes del alta médica.

La recuperación

La recuperación tras una rinoplastia ultrasónica varía según diversos factores, como la edad, tipo de piel y la magnitud de la corrección realizada.
La mayoría de los pacientes pueden retomar sus actividades normales en un lapso de 1 a 2 semanas.

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Cirugía

Por lo general, oscila entre 1 y 4 horas, dependiendo de la complejidad del caso y los ajustes estéticos necesarios.
Se cuenta con un equipo de especialistas, incluyendo el cirujano plástico especializado en rinoplastia ultrasónica y el anestesiólogo.

La mayoría de los casos no requieren hospitalización prolongada y suelen permitir el alta el mismo día. En algunos casos específicos, podría ser necesaria una noche de ingreso para una recuperación más controlada.

Se aplica un apósito nasal y, en ciertos casos, se colocan dispositivos de drenaje linfático para minimizar la inflamación y favorecer una recuperación más rápida y confortable.

Beneficios

La rinoplastia ultrasónica representa la vanguardia en cirugía nasal. Esta técnica innovadora no solo aborda deformidades nasales, sino que también mejora la respiración a través de un procedimiento quirúrgico basado en ultrasonidos.

Esta avanzada técnica posibilita intervenciones más precisas y reduce significativamente el tiempo de recuperación, ofreciendo resultados estéticos y funcionales excepcionales en menor tiempo.

Postoperatorio

La recuperación tras una rinoplastia ultrasónica varía según diversos factores, como la edad, tipo de piel y la magnitud de la corrección realizada. La mayoría de los pacientes pueden retomar sus actividades normales en un lapso de 1 a 2 semanas. Sin embargo, se aconseja evitar el ejercicio físico intenso durante al menos un mes después del procedimiento. Los resultados finales suelen ser evidentes entre los 6 y 12 meses posteriores a la cirugía, momento en el cual se aprecia la definición total y la forma definitiva de la nariz.

¿Eres el candidato / candidata ideal?

La rinoplastia ultrasónica es ideal si quieres mejorar la forma de tu nariz o si tienes problemas respiratorios. En este caso, es una opción perfecta siempre que hayas alcanzado la madurez facial. Recuerda que cada persona es diferente, así que lo mejor es hablar con un cirujano plástico especializado para saber si es la opción adecuada para ti y tus expectativas.

Vuelta a la normalidad

Se espera que los pacientes puedan reincorporarse a sus actividades habituales después de aproximadamente una o dos semanas. Sin embargo, es posible que persista cierta hinchazón y sensibilidad en la zona durante algunas semanas más.
Es crucial tener en cuenta los tiempos de recuperación, siendo pacientes para permitir que la nariz se cure y se asiente en su forma definitiva. Además, es importante comprender que la cirugía no puede modificar ciertos aspectos anatómicos como las características de la piel (como pieles gruesas), y condiciones inflamatorias preexistentes (como el acné o la rosácea), que pueden afectar el resultado final de la cirugía.

La intervención

La rinoplastia ultrasónica es una técnica innovadora y precisa para mejorar la forma y función de la nariz. Este procedimiento se lleva a cabo en nuestra clínica empleando tecnología de ultrasonidos de vanguardia para realizar cortes precisos en el tejido óseo sin afectar los tejidos circundantes. Nuestro equipo de cirujanos altamente capacitados realiza esta intervención con minuciosidad y cuidado, personalizándola para cada paciente de manera única. Esta técnica avanzada permite una recuperación más rápida, con menos hinchazón y molestias postoperatorias.

Los resultados

Los resultados estéticos tras una rinoplastia ultrasónica suelen ser una de las principales inquietudes para nuestros pacientes. Por lo general, suelen estar ansiosos por saber si el resultado final de la cirugía cumplirá con sus expectativas estéticas.

Por este motivo, la comunicación con nuestro equipo cirujano es crucial en la Clínica Dra Brasó, para que los pacientes puedan comprender claramente qué cambios se pueden lograr y cómo se adaptarán a su estructura facial única. Tanto nuestro equipo médico de cirujanos como nuestros pacientes, buscamos resultados que mejoren la estética de su nariz sin que parezca que ha sido intervenida quirúrgicamente, consiguiendo una apariencia equilibrada y en consonancia con sus rasgos faciales.

Nuestra garantía

Seleccionar a un cirujano plástico especializado en rinoplastia ultrasónica es un paso fundamental para asegurar resultados exitosos y una experiencia segura. La Dra Brasó, considerada uno de los 10 mejores cirujanos del país, cuenta con un equipo profesional y especializado, así como con los últimos avances tecnológicos para conseguir los mejores resultados con la máxima seguridad.
Antes de que cualquier paciente se embarque en una rinoplastia, en la Clínica Dra Brasó establecemos un diálogo abierto con el paciente para definir metas realistas y alcanzables. Esto implica comprender los límites de la cirugía y acordar un objetivo estético que sea factible y armonioso con los rasgos faciales individuales.